jueves, diciembre 01, 2005

Songdo City, meca de la informática (Clarin.com)

Pamela Licalzi O'Connell. (informatica@clarin.com)

maginemos por un momento contenedores públicos para basura equipados con una tecnología de identificación por radiofrecuencia para pagarles a los recicladores cada vez que arrojan en ellos una botella; casas de gente anciana en las que los pisos son sensibles a los impactos, pueden detectar el golpe de la caída de una persona y llamar inmediatamente a la asistencia médica; celulares que almacenan historias clínicas y pueden usarse para comprar los remedios recetados...

Estos son sólo algunos de los servicios soñados por los estudiantes de diseño industrial de la State University de Long Beach, USA, que podrían llegar a ser usados en New Songdo City, la ciudad ubicua que está siendo construida en Corea del Sur.

Una ciudad ubicua

En una ciudad ubicua todos los sistemas importantes de información (residenciales, médicos, comerciales, gubernamentales, etc) comparten sus datos, y las computadoras están incorporadas a las viviendas, las calles y los edificios de oficinas. New Songdo está situada en una isla de una 680 hectáreas, construida por el hombre cerca de la costa, frente a la ciudad de Inchon, y a unas 40 millas de Seúl. Es una ciudad que está surgiendo de la nada.

Aunque en Corea del Sur ya hay otros intentos de construcción de ciudades-U, los funcionarios gubernamentales consideran que New Songdo es especial. "New Songdo será la primera ciudad que se ajuste totalmente al concepto de ciudad-U, no solo en Corea sino en todo el mundo", dice Mike An, director del proyecto en la Incheon Free Economic Zone Authority, la agencia gubernamental que lo supervisa.

Privacidad en riesgo

En Occidente, la computación ubicua es una idea polémica, pues plantea problemas de privacidad y convoca el fantasma de una sociedad vigilada. Pero en Asia, esta concepción es vista como una oportunidad para mostrar capacidad tecnológica y atraer inversiones extranjeras.

Para hacer realidad esta ambición cuenta, en gran medida, con John Kim, un coreano-estadounidense que dirige parte de la planificación de New Songdo como ciudad-U. Kim, ex director de diseño de Yahoo!, es vicepresidente de estrategias de New Songdo City Development.

Kim dice que la infraestructura de alta tecnología de la ciudad será un gran desafío para las nuevas tecnologías, y la ciudad misma será una muestra de una forma de vida digital, la vida-U.

"La vida-U se convertirá en su propia marca, su propio estilo de vida", dice Kim. Todo empieza con la llave de la casa de cada habitante, que será una tarjeta inteligente. Se podrá usar la misma llave para viajar en el subterráneo, pagar estacionamiento, ver una película, tomar en préstamo una bicicleta pública gratuitamente, etc. Será anónima, no estará vinculada a la identidad, y si el usuario la pierde, puede cancelarla rápidamente y resetear la llave de la puerta de su casa.

Los residentes disfrutarán de llamadas de videoconferencia entre vecinos, video a pedido y acceso inalámbrico desde cualquier punto de Songdo.

Si logra estar realmente a la altura de su actual prestigio y en el futuro se convierte en una ciudad exportable —sus críticos temen otra decepción ante una ciudad planificada, como fue Brasilia— lo más probable es que Songdo sea una buena oportunidad para estudiar el uso en gran escala de la identificación por radiofrecuencia o Radio Frequency Identification (RFID), las tarjetas inteligentes y los dispositivos basados en sensores. Aún cuando las sociedades occidentales tarden cierto tiempo en incorporar la próxima ola de la computación.

Se dice que New Songdo, una zona donde el inglés será la lengua franca, es la urbanización privada más grande del mundo. Se estima que cuando se complete la obra, en 2014, este proyecto de 25 mil millones de dólares albergará a 65 mil personas, y que en la ciudad trabajarán 300 mil.

Laboratorio de la técnica

"Creemos que New Songdo será una suerte de laboratorio para comprender cómo quiere la gente usar la técnica", dice B. J. Fogg, director del Persuasive Technology Lab de la Stanford University. En ese caso, será mucho más fácil hacer ese experimento en Asia que en Occidente. "Gran parte de esta tecnología fue desarrollada en laboratorios de investigación en los Estados Unidos, pero en Corea hay menos regulación y menos obstáculos sociales para aplicarla —explica Anthony Townsend, director del departamento de investigación del Institute for the Future de Palo Alto—. Históricamente, en Corea la expectativa de privacidad es menor. Corea está dispuesta a dejar de lado ciertas cuestiones difíciles para tomar la delantera y fijar pautas."

Necesidades de la gente

Kim insiste en señalar dos cosas: que la vida-U no se usará para testear "basura"; y que los servicios digitales serán diseñados en función de las necesidades de las personas, y no en función de la tecnología.

Aunque el material publicitario de New Songdo afirma que el proyecto trata de evitar las "tensionantes fallas que comprometen" a las ciudades existentes,

Townsend dice que duda de que la nueva ciudad sea capaz de igualar la energía creativa de, digamos, Seúl. "¿Será realmente un lugar donde la gente quiera experimentar?" se pregunta.

La capacidad de hacer una investigación tan amplia es envidiable, opinó Fogg. "Es una ventaja competitiva para los coreanos. Ellos serán los primeros en saber cómo están las cosas. Sin embargo —agrega con firmeza—, me atrevería a vaticinar que muchos servicios fracasarán."


(c)The New York Times y Clarín. Traducción de Ofelia Castillo.

No hay comentarios.: